Excavar un campo de concentración es algo muy diferente a cualquier otro tipo de yacimiento arqueológico. Cualquier objeto que en otro contexto resulta trivial puede tener aquí connotaciones terribles.
Por ejemplo, un abridor de latas.
Los presos en los campos de concentración pasaban un hambre espantosa. De hecho, miles murieron de hambre durante su encierro, sobre todo aquellos que no contaban con familiares cerca que pudieran llevarles comida al campo o que no tuvieran nada que intercambiar con los vecinos de la zona.
La falta de una alimentación adecuada traía consigo, además, anemia, enfermedades y estreñimiento crónico. Según testimonios recogidos por el historiador Javier Rodrigo, algunos presos desesperados trataban de extraerse excrementos utilizando las llaves de abrir latas. Con frecuencia esto provocaba hemorragias.
Algunos presos se desmayaban de dolor sobre las letrinas.
5 comentarios:
Un ejemplo muy gráfico de reutilización en un contexto concentracionario ¿no?
Junto con los usos nuevos para las cosas os recuerdo alguna palabra nueva que surgió de aquella tremenda experiencia: albaterina.
Cuenta Eduardo de Guzmán que, cuando los intentos de extraer excrementos del ano con este tipo de instrumental fallaban en el campo de Albatera, los prisioneros concluían que habían hecho albaterina: Al Váter y ná.
Eros.
Ps- Besitos.
Echo de menos el olor del Napalm.
¿Ahí no hay una boca de mina en la que arrojaban a los presos condenados a muerte para después lanzarles granadas?
Efectivamente, es la entrada a la mina de La Gamonita. Pero la historia de la llamada "cuerda india" (se lanzaba a los presos atados al pozo y después se los mataba con una granada de mano) no está comprobada. Hasta donde sabemos podría ser una mera leyenda concentracionaria. Eso no quita para que en la mina pueda haber cadáveres de represaliados, como en otros lugares. El problema es que está muy llena de escombros.
Una consulta, entiendo que para excavar en dicha mina se tendría que pedir autorización a algún juez ¿no?, o simplemente excavando, si aparecen restos se avisa al juez de turno.
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