Consérvese hasta fin de trayecto

La fosa 7.1. es la continuación de la intervención realizada en 2011 por el equipo coordinado por Laura Muñoz en el cementerio municipal de Castuera. En la anterior exhumación se habían recuperado los restos de dieciocho individuos, aunque dos de ellos sólo fueron parcialmente exhumados al encontrarse bajo una de las aceras pavimentadas del cementerio. En 2012 el sector de excavación pudo ser ampliado unos 3 metros con el objetivo de completar la exhumación de dichos individuos. Además, se localizaron otros cuatro cuerpos, uno de los cuales no pudo ser recuperado totalmente, pues de nuevo se encontraba parcialmente bajo el nivel de acera. Entre ellos se encuentra el individuo 21.

Objetos asociados al individuo 21

 

Entre los objetos asociados a él documentamos unas gafas y unas láminas de acetato, posiblemente ubicadas dentro de un bolsillo en el momento del fusilamiento. La cuidada extracción en campo de estos objetos y su análisis en laboratorio han aportado datos interesantes. Estas cuatro láminas de acetato irían cosidas con hilo por los bordes. Podría ser una funda de plástico; en su interior se puede ver la impronta dejada por dos documentos en papel, un billete o vale de metro, un sello y una mecha de algodón. En el billete de metro puede leerse en el anverso (5 Metropolitano de Madrid 5/..imos) podría tratarse de un vale o billete por valor de 5 céntimos. En el reverso se puede leer (Este billete no puede ser útil../ viajar debiendo canjearse en el billet..correspondiente.. /que haya../ Queda prohibido..billete / para transacciones..aplicación../ dis.. / se.. / en.. / vi..).

En cuanto al sello, se encontraba en la parte inferior izquierda de la funda; se corresponde con un sello por valor de 5 céntimos con el número 5 en el centro rodeado de la leyenda República Española.

Durante la Guerra Civil el Consejo Superior Bancario autorizado por la Comisaría de Estado, creó unos vales de cinco, diez y quince céntimos; las taquilleras del metro de Madrid los entregaban como cambio a los viajeros, quienes podían utilizarlos para adquirir nuevos billetes.

Por el campo de concentración de Castuera pasó una enorme cantidad de presos; este aluvión de gente hace muy difícil conocer la procedencia de los individuos represaliados. En todo caso, tenemos que hacer constar la llegada masiva de presos republicanos procedentes de Madrid tras el derrumbe de los frentes. Como señala el superviviente Lizarriturri (2003: 98): Nos llevaron a la falda de una montaña donde había amontonados unos barracones prefabricados que debíamos montar rápidamente. Esperaban una avalancha de liberados de Madrid y otras provincias que tendrían que recalar aquí. Como en el caso de los individuos exhumados en 2011, los seis esqueletos recuperados por nosotros aparecían atados con cable por las muñecas, esposados de dos en dos. Este era el modo de actuar habitual a la hora evacuar y trasladar presos desde el campo de concentración de Castuera, hacia la muerte.

Posted by Yolanda Porto y Xurxo Ayán.